CTERA en defensa de la Democracia y en contra del discurso de odio, racista y fascista

 

Todavía resuenan las expresiones del Presidente Milei vertidas en Davos y sigue despertando gran preocupación la “fluidez lectora” con la que el mandatario desplegó su discurso de odio con rasgos racistas y fascistas. 

Las y los funcionarios de la cartera educativa del gobierno de Milei, ¿están de acuerdo con estas expresiones? ¿se van a expresar al respecto? Las políticas educativas que propondrán para 2025 ¿se basarán en ese marco ideológico expresado por el presidente?

¿Qué harán al respecto las fundaciones ONGs y/o empresas privadas que actualmente intervienen en la definición de las políticas educativas en las alianzas que establecen con este gobierno como, por ejemplo, en la campaña nacional de alfabetización? ¿creen que “alfabetizar” es sólo un método que se puede aplicar independientemente de estos preceptos ideológicos?

¿Qué sostienen al respeto los organismos multinacionales como UNESCO, UNICEF, el BID o la  OCDE que también promueven programas y proyectos educativos en alianza con este gobierno?

Por si no quedó claro, y aunque el mismo Milei diga que no dijo lo que dijo, recordemos que entre sus expresiones, ha planteado que el progresismo es un “virus mental… una gran epidemia de nuestra época que debe ser curada… es el cáncer que hay que extirpar”… Que el Estado no puede intervenir para lograr una distribución justa de la riqueza, y que además cree que la noción de justicia social es “siniestra y aberrante, con entramados teóricos marxistas”. Además, consideró que hay que erradicar derechos como la educación, la vivienda, el acceso a internet o la recreación cultural, por tratarse de “privilegios” por los cuales la población debería pagar. 

A esto hay que agregar su nueva arremetida contra el feminismo, la diversidad, la inclusión, la inmigración, el derecho al aborto y la problemática ambiental, apelando a frases hechas que realmente preocupan, y más aún viniendo de un primer mandatario, tales como: “El feminismo radical es búsqueda de privilegios”; “no es que las mujeres ganen menos que los hombres, lo que pasa es que ellas no acceden a las actividades mejor remuneradas” … “ambientalismo fanático donde los seres humanos somos un cáncer que debe ser eliminado, y el desarrollo económico poco menos que un crimen contra la naturaleza” … “La agenda sanguinaria y asesina del aborto” … “La ideología de género constituye lisa y llanamente abuso infantil. Los gays son pedófilos” y “están dañando irreversiblemente a niños sanos mediante tratamientos hormonales y mutilaciones”.

Milei fue más allá en sus planteos, legitimando la meritocracia y atacando a la educación y a las organizaciones sindicales. En Davos, también expresó: “El mérito fue dejado de lado por la doctrina de la diversidad, que implica un retroceso hacia los sistemas nobiliarios de antaño. Se inventan cupos para cuanta minoría se le ocurra a los políticos…”. Y agregó que “las universidades más prestigiosas del mundo están formando las élites de nuestros países para impugnar y negar la cultura, las ideas y los valores que nos hicieron grandes, lesionando aún más nuestro tejido social, al enseñarles a nuestros jóvenes a sentir vergüenza por nuestro pasado. Considera que son “centros de adoctrinamiento” disfrazados de universidades, sindicatos y organizaciones sociales.

A poco de comenzar un nuevo ciclo lectivo, nos preguntamos si todos estos actores (funcionarios, fundaciones, empresas, organismos internacionales, medios hegemónicos…, Consejo Federal de Educación, Consejo de la Calidad, etc. etc.) van a hacer algún planteo al respecto o van a mirar para otro lado para definir las políticas educativas como si no hubiera pasado nada.

Desde CTERA denunciamos esta situación; consideramos que es muy grave y que no se puede dejar pasar como tampoco se pueden dejar pasar ni naturalizar las devastadoras consecuencias de las políticas socio-educativas implementadas por el gobierno de Javier Milei desde que asumió como presidente de nuestro país en diciembre de 2023. Pasemos lista:

  • Degradación del Ministerio de Educación a Secretaría, y sumisión de esta cartera al Ministerio de “Capital Humano”.
  • Vulneración del derecho a la educación, que se ve plasmada en los sistemáticos intentos de declaración de la educación como un servicio y del conocimiento como un bien de mercado.
  • Desfinanciamiento y ajuste del presupuesto educativo que cayó un 40% entre el ejecutado en el año 2023 y el presupuestado para 2025, alcanzando su nivel más bajo en 40 años. 
  • Incumplimiento de la Ley de Financiamiento Educativo y de la Ley de Educción Nacional que exigen la inversión del 6% del PBI en educación.
  • Suspensión del Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), desconociendo que este fondo es un derecho conseguido en el año 1998 gracias a la lucha docentes, que significa la pérdida entre un 10% y 15% del salario. 
  • Eliminación del financiamiento para el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación y para Educación Técnico-Profesional. 
  • Paralización de la obra pública educativa, interrupción de entrega de equipamiento, computadoras, libros y materiales didácticos. 
  • Instauración de un vouchers educativo destinado a las familias que mandan a sus hijos a las escuelas privadas. Recursos del Estado financiando directamente a la demanda privada.
  • Inhabilitación de la participación concreta de la docencia y de sus organizaciones sindicales para la definición de las políticas del sector: reducción de la instancia paritaria y de las mesas técnicas a su mínima expresión, exclusión de los sindicatos en las reuniones del CFE, cambios curriculares en la formación docente sin participación de las/os educadoras/es.
  • Interrupción de programas, proyectos e instancias de formación en temas transversales como la ESI, la educación ambiental y los derechos humanos.
  • Desmantelamiento del Instituto Nacional de Formación Docente (INFoD) y del Programa Nacional de Formación Permanente “Nuestra Escuela”.
  • Precarización laboral a través de la imposición del presentismo, premios coercitivos y sistemas punitivos de evaluación y acreditación de las instituciones de formación docente”. 
  • Sumisión a los dictámenes de las corporaciones y funciones privadas para la definición de la política educativa, como por ejemplo, el Plan Nacional de Alfabetización”, que responden a las lógicas de las tendencias privatizadores y mercantilizadoras de la educación.

Resulta difícil pensar la educación del porvenir si quienes tienen la responsabilidad de conducir políticamente el país aceptan y legitiman estas concepciones retrógradas, antiderechos y negacionistas.

Por todo esto, desde CTERA convocamos a la resistencia frente a las políticas de la extrema derecha y proponemos la movilización permanente de toda la comunidad educativa para la construcción colectiva de alternativas político-pedagógicas en clave de derechos y en defensa de la Educación Pública y de la Democracia.

Buenos Aires, 29 de enero de 2025

Sonia Alesso

Secretaria General de CTERA

Miguel Duhalde

Secretario de Educación de CTERA