El secretario general de la CTA, Hugo Yasky, afirmó esta mañana en conferencia de prensa que “reclamamos justicia social y por eso vamos a marchar al Ministerio de Trabajo”, al formular la convocatoria a la Jornada Nacional de Movilización que se llevará a cabo mañana en todo el país.
En la rueda de prensa, que se llevó a cabo en la sede nacional de la Central de Trabajadores de la Argentina, sita en la calle Piedras 1065 de la Capital Federal, también estuvieron presentes el secretario adjunto, Pedro Wasiejko; el secretario Gremial, Victorio Paulón; la secretaria de Formación de la CTA y secretaria general de CTERA, Stella Maldonado; Gustavo Rollandi y José Urreli, de la Mesa Nacional de la Central, y Hugo Godoy, secretario general de la CTA de la provincia de Buenos Aires, entre otros.
Sobre la Jornada Nacional de Movilización que se desarrollará marchando frente al Ministerio de Trabajo de la Nación en la ciudad de Buenos Aires y en las agencias territoriales de la repartición laboral en todas las capitales de provincia, Yasky señaló que se apunta a que el Estado brinde respuestas concretas para “que los trabajadores no paguemos una crisis que no generamos. Lamentablemente -reprochó-las políticas que se están aplicando no van en ese sentido”.
Sostuvo también que “continuamos reclamando el blindaje social que consiste en adoptar medidas que garanticen un modelo distributivo más justo para que los trabajadores no terminemos pagando las consecuencias de la crisis”.
Las principales medidas reclamadas son Asignación Universal por Hijo, Seguro de Empleo y Formación para los compañeros desocupados, paritarias libres y abiertas, aumento de emergencia para los jubilados y garantizar el 82% móvil y el respeto a la libertad y democracia sindical, entre otras reivindicaciones. Asimismo,Yasky manifestó la firme oposición de la CTA al “Tarifazo” en el servicio de gas.
Por eso, el dirigente sindical expresó que la movilización se centra en que “se suscriban tres convenios de la OIT. Ese es el compromiso que asumió el Gobierno cuando estuvo hace un mes en Ginebra: Uno que garantice que no haya despidos sin causa, otro sobre la seguridad social y el restante sobre el salario mínimo. Creemos que se debe convocar a todos los trabajadores que aún no pudieron cerrar la discusión paritaria. El salario tiene que ser el sostén de la demanda y del mercado interno para que la crisis no nos golpee de manera doble, porque ya hay recesión con las exportaciones y sería gravísimo que hubiera recesión por la situación interna. Se están perdiendo puestos de trabajo”, remarcó ante los periodistas.
En ese sentido, Yasky denunció que «hay 60 despedidos en el Correo Argentino y tenemos situaciones de flagrantes violaciones a la libertad sindical. UALA, el sindicato de los pilotos de Austral, está postergado sin ninguna legalidad. Se está haciendo lo mismo con los trabajadores de subterráneos, que no tienen respuesta. Los compañeros de SIMECA, los motoqueros, que tienen el sindicato más representativo y que hace 4 años están pidiendo la Personería Gremial, recibieron una bofetada al darle la personería a un sindicato inventado y no representativo. Lo mismo está pasando con otras situaciones en otros lugares del país”, refiriéndose así a cómo la falta de libertad y democracia sindical es otro puente por el que atraviesa la crisis para golpear a los trabajadores.
Por otra parte, Yasky agregó que la convocatoria también incluirá el reclamo contra el Tarifazo en el servicio de gas domiciliario: “Acá se dice que los Tarifazos van dirigidos a los sectores pudientes. Pero las perdigonadas están llegando a los bolsillos populares. Y si a este deterioro de los salarios por la inflación, por la falta de movilidad ascendente del salario, le sumamos un Tarifazo, está claro que por más que se diga otra cosa, en la realidad la crisis la vamos a pagar los que menos tenemos”.
Ante la requisitoria de la prensa, el secretario general de la CTA aseguró que “la crisis económica está desarrollándose y se puede profundizar si son los sectores populares los que empiezan a sufrir cada vez más las consecuencias. Ya hay recesión externa porque la crisis de los países del norte significó caídas de exportación, con lo cual hubo pérdidas de puestos de trabajo. Si no se le da a los bolsillos de los sectores populares una capacidad de consumo, si el poder adquisitivo de los trabajadores, de los jubilados no adquiere la fuerza que hace falta para sostener la demanda en el mercado interno, la salida va a ser la que estamos denunciando: que la crisis la vamos a pagar los trabajadores con menor capacidad de consumo, pérdida de fuentes de trabajo, caídas de salario, retracción del poder de compra. Todo esto significa menos recaudación del Estado, menos movimiento de la economía, menos producción y más despidos”.
Nota de Nadia Mansilla para ACTA.