Obstinadamente maestros – Nota de opinión de Sonia Alesso en el diario Página 12 – Domingo 5 de Febrero

Faltan 20 días hábiles para que empiece el ciclo lectivo 2017.

Los maestros y profesores nucleados en Ctera marchamos en enero y en febrero exigiendo convocatoria urgente a la Paritaria Nacional Docente. Los cinco gremios nacionales venimos advirtiendo que el Estado Nacional es responsable de garantizar el ciclo lectivo.

La paritaria nacional garantiza un piso salarial mínimo para todos los docentes del país. También fondos nacionales coparticipables para todas las provincias argentinas.

El ministro Esteban Bullrich siendo legislador votó la ley que hoy incumple. Es una Ley que fue respaldada por amplísimas mayorías en el Congreso de la Nación en el año 2005.

El 2 de febrero, en plenas vacaciones, miles de docentes de todo el país, desde los lugares más remotos de la Argentina, marchamos al Congreso y al Ministerio de Trabajo de la Nación para exigir que se cumpla la Ley de Financiamiento Educativo que establece las paritarias docentes nacionales.

Esta ley es fruto de una lucha que comenzamos por los 80, con la Marcha Blanca y continuamos en los 90 con la Carpa Blanca, y también es fruto de un proceso político que generó discusiones paritarias anuales y llevó el presupuesto educativo del 3 al 6,5 por ciento del PBI.

Los maestros y profesores nucleados en Ctera no estamos dispuestos a retroceder ni aceptar techos salariales. Pretenden que retrocedamos en nuestras conquistas, pretenden des-financiar la escuela pública.

Porque la sanción de la Ley 26.075 (Ley de Financiamiento Educativo) y su aplicación desde el 2006 marcaron un punto de inflexión en las políticas públicas educativas y en la centralidad del Estado Nacional en la materia.

Cualitativamente, además, garantizó que un porcentaje de la coparticipación federal en cada provincia fuera destinado a la inversión educativa con tres prioridades (Artículo Nº5): mejorar las condiciones laborales y salariales, jerarquizar la carrera docente y promover la calidad de la formación inicial y permanente.

Hoy pretenden que convalidemos con nuestro silencio, un ataque a las leyes y a la Escuela Pública. Y que abandonemos a su suerte a miles de docentes y alumnos que antes de la sanción de estas leyes, vivían en provinciales llamadas despectivamente “inviables”.

Pero olvidan que somos “obstinadamente maestros”, que vemos todos los días como las escuelas en lugar de distribuir libros y netbooks, reciben cada día más niños y jóvenes en los comedores escolares.

Vemos como nuestro salario se deteriora y flexibiliza. Y advertimos como las políticas neoliberales campean en cada nueva iniciativa de la cartera educativa.

“La Educación del Pueblo se Defiende” cantamos en nuestras marchas. Pero esta tarea no es solo de los maestros y profesores, es una histórica lucha de toda la sociedad argentina, lucha a la que los maestros no estamos dispuestos a renunciar.

Con la misma convicción, con la misma fuerza, con el mismo compromiso que vamos todos los días a la escuela, llenaremos las plazas del país defendiendo la paritaria nacional, nuestros derechos y la Educación Pública.


Secretaria general de Ctera.