Con actividades en todo el país, hoy se desarrolla la primera jornada en el marco del Día Nacional Contra la Violencia Institucional, instituido recientemente por Ley en la fecha en la que se recuerda la Masacre de Budge. Ya con anterioridad, en el año 2012 habíamos celebrado la aprobación de la Ley que implementa el Mecanismo Contra la Tortura. La promulgación de esta legislación reconoce una de las banderas de los organismos de Derechos Humanos y organizaciones de familiares de víctimas de este flagelo, convirtiéndola en parte de las políticas de Estado.
Aquellos organismos fueron y siguen siendo imprescindibles en lo que respecta a la visibilización del fenómeno, a partir de los reclamos por los cientos casos de Gatillo Fácil y de torturas en las comisarías de todo el país.
Eliminar este fenómeno es una gran deuda de la Democracia, y parte de este desafío es la desarticulación del discurso que sostiene a las prácticas represivas para enfrentar la cuestión social. En la contraparte de este fenómeno se encuentra el objetivo más grande de conformar entre todos y todas, una política de seguridad democrática y participativa.
No obstante, siguen existiendo gobiernos locales que acuden a las fuerzas públicas de seguridad
para acallar los reclamos legítimos de la sociedad; desde el asesinato de Carlos Fuentealba por parte fuerzas de seguridad en Neuquén a la represión del Gobierno de la Ciudad en el hospital Borda, la violencia institucional son un ejemplo de ello. Por ello, las responsabilidades políticas en esta materia no deben ser omitidas. Desde CTERA acompañamos y participamos en esta jornada de lucha, compromiso y difusión contra la Violencia Institucional.
Rogelio De Leonardi
Secretario de Derechos Humanos
CTERA
